La ciberocupación, también conocida como cybersquatting (en inglés) o ciberquating (adaptando la expresión al castellano), es una técnica de fraude en la que individuos o empresas registran nombres de dominio de sitios web que se asemejan a marcas comerciales, nombres de empresas u otras propiedades intelectuales con la intención de obtener beneficios económicos o causar confusión. En estas reflexiones nos centraremos en un subtipo específico de ciberocupación llamado «typoSquatting».
El typoSquatting o “tiposquating” (adaptando la expresión al castellano) consiste en registrar nombres de dominio que son variaciones deliberadas de una marca o nombre de empresa con errores tipográficos comunes, como letras faltantes o sobrantes o sencillamente mal escritas. Estos nombres de dominio se asemejan lo suficiente al original como para confundir a los posibles visitantes y llevarlos a sitios web falsos o potencialmente maliciosos, previamente clonados para dar imagen de normalidad.
"Estos nombres de dominio se asemejan lo suficiente al original como para confundir a los posibles visitantes y llevarlos a sitios web falsos ."
La idea central detrás del typoSquatting es aprovechar los errores de escritura comunes que las personas podemos cometer al escribir una URL. Así, si una empresa tiene el sitio web «Ejemplo.com», un typoSquatter podría registrar nombres de dominio como «Ejemp1o.com», “Ejempl0.com” o «Ejemploo.com», etc. Cuando los usuarios introducen estas variantes por error, pueden ser redirigidos a sitios que buscan beneficios económicos ilegítimos. ¿Parece una tontería?… pues no lo es. Puedes ampliar esta información (entre otras formas de fraude electrónico) y las pérdidas millonarias que produce en el siguiente enlace https://www.20minutos.es/noticia/4585166/0/asi-hackearon-algunas-de-las-empresas-mas-importantes-del-mundo-como-apple-microsoft-paypal-uber-o-tesla/
Los objetivos de los typoSquatters pueden variar. Algunos pueden mostrar anuncios publicitarios en sus sitios web falsos para generar ingresos por clicks, mientras que otros sencillamente pueden intentar engañar a las personas para que divulguen información personal o financiera sensible creyendo que están en la página legítima. Esta práctica, además de los peligros evidentes que conlleva para los usuarios puede dañar la reputación de la empresa cuya marca está imitando, ya que los visitantes pueden pensar que están en un sitio web oficial. Si ese sitio clonado tiene una tienda online el peligro está asegurado y las pérdidas millonarias también (pues no olvidemos que todos estos fraudes son masivos aprovechando la teoría de la “ingeniería social”).
Para protegernos del typoSquatting y otros tipos de ciberocupación, las empresas han empezado a considerar registrar nombres de dominio similares a su marca para evitar que terceros los utilicen de manera fraudulenta pero aún así debemos estar alerta. La vigilancia constante de los nombres de dominio relacionados con las marcas es esencial para detectar y tomar medidas legales contra los ciberocupas por las empresas y para evitar caer en el fraude por los particulares. Puedes ampliar la información en el siguiente enlace https://gdempresa.gesdocument.com/noticias/cybersquatting-en-la-red