Es una realidad: los ciberdelincuentes están cada vez más interesados en apropiarse de datos de menores de edad (y jóvenes), y esto plantea una preocupación creciente en el mundo digital. Pero ¿por qué estas redes organizadas se enfocan en los niños y adolescentes y jóvenes?. A continuación te explicamos las razones de esta preocupante tendencia.
En primer lugar, es un hecho que los datos de los menores y los jóvenes son atractivos porque suelen estar menos protegidos y controlados que los de los adultos. Los niños a menudo no tienen la misma conciencia de seguridad online que los adultos y, a veces, comparten información personal sin darse cuenta de los riesgos en redes sociales, chats comunes, etc. Los delincuentes pueden aprovechar esta vulnerabilidad para recopilar datos como nombres, direcciones, números de teléfono y fechas de nacimiento de un lado y fotos, de otro.
"La información de menores y jóvenes es valiosa en el mercado negro online (dark web)."
Los ciberdelincuentes habitualmente buscan información de menores y jóvenes porque pueden utilizarla para cometer fraude y robo de identidad. Los datos de los jóvenes pueden ser utilizados para abrir cuentas bancarias falsas, solicitar tarjetas de crédito o incluso cometer actos ilegales en su nombre. Dado que los menores y jóvenes no suelen supervisar su historial crediticio, estos delitos pueden pasar desapercibidos durante mucho tiempo.
Otra razón importante es la explotación online. Los ciberdelincuentes pueden utilizar la información personal de un niño para ganarse su confianza (lo que se conoce como “grooming”), engañarlos para concertar un encuentro (“cebo”) o extorsionarlos. Esto puede llevar a situaciones muy peligrosas y dañinas a nivel emocional y psicológico. Puedes consultar algunas definiciones en la página de OEDI en el siguiente enlace https://oedi.es/ciberdelitos/
Por último, la información de menores y jóvenes es valiosa en el mercado negro online (dark web). Los datos pueden venderse a otros delincuentes, lo que genera ganancias sustanciales. Esto crea un incentivo adicional para que los ciberdelincuentes se centren en los niños y adolescentes.
Para proteger a los menores de edad, es fundamental que los padres (y tutores) supervisemos de cerca su actividad online y eduquemos a los jóvenes sobre los riesgos digitales y electrónicos. Es importante fomentar una comunicación abierta para que los niños se sientan seguros compartiendo cualquier experiencia desagradable que puedan tener en línea.
En resumen, los ciberdelincuentes se están centrando en los datos de menores de edad debido a la falta de protección y medidas de seguridad a los que se someten, la posibilidad de cometer fraudes con este tipo de datos y la explotación online que se genera por su venta. Es fundamental tomar medidas para proteger a los niños y adolescentes en el mundo digital y concienciarlos sobre los peligros en línea.
Puedes ampliar esta información consultando el siguiente enlace https://www.cope.es/programas/la-linterna/noticias/por-que-los-colegios-son-gran-objetivo-los-ciberataques-asi-roban-los-datos-hijo-20231007_2936473